miércoles, 12 de diciembre de 2012

De periodistas para periodistas

Un debate en la universidad en el que le preguntan a un hombre si Estados Unidos es el mejor país del mundo. En ese momento, el hombre empieza a dar una serie argumentos para defender que no es así (en contra de todos los que están presentes en el debate). Probablemente, haya quien tan sólo con estas líneas ya sepa de qué tratará este post.

Esta situación es el punto de partida de The Newsroom una serie de periodistas y para periodistas. La serie se desarrolla en una redacción de informativos de una televisión norteamericana (ACN). Cada uno de los capítulos gira en torno a un hecho real que ha tenido repercusión mediática, en The Newsroom se muestra cómo es el proceso de gestación que convierte el hecho en noticia. La serie ha recibido críticas porque las noticias de esa redacción se enfocan siempre desde el mismo lado, a favor del Partido Demócrata con el que es afín su creador, Aaron Sorkin (artífice también de la magnífica “El ala oeste de la Casa Blanca”).

¿Hasta qué punto la serie no es un reflejo de lo que ocurre en la realidad? El programa que dirige y presenta Will McAvoy, el protagonista de la serie, es un informativo en el que se incluye opinión por lo tanto, en la serie no se trabaja para hacer un programa meramente informativo. Lo que pretende mostrar The Newsroom es “el proceso” de creación de una noticia en el que hay que seguir una serie de pasos para contrastar y confirmar el hecho. Que se añada o no opinión en un noticiario es cosa de la dirección del programa es por esto que las críticas a la serie como una serie partidista pueden estar injustificadas.

Actualmente, los medios están para informar, pero también están para formar porque son los principales creadores de opinión pública. Tan sólo depende de la conciencia formada del ciudadano el poder discernir entre un medio que le adoctrina y un medio que aporta información. Son muchos los que se quejan de que los medios están sesgados o que no son lo suficientemente objetivos, pero es que el ciudadano tiene que aprender a coger perspectiva respecto de las informaciones y eso no se hace de otra manera que leyendo mucho. Los medios aportan una información, pero dicha información deja de ser objetiva en el momento que un medio decide cubrirla o no hacerlo ¿o no?

Volviendo a The Newsroom, puede pasar que la serie guste o no. Lo que es cierto es que está bien hecha y que refleja con bastante realismo (salvando las distancias) el proceso de creación de información, la influencia de los lobbys, la creación de opinión pública desde los medios de comunicación, el funcionamiento de un gran grupo mediático, etc. Probablemente, apasione a periodistas y deje indiferente a una gran parte del resto de la población porque como ya he mencionado antes, es una serie de periodistas para periodistas.
Otra cosa es que sea un instrumento que Sorkin utilice para fomentar sus ideas y trasmitirlas al conjunto de la sociedad.

Si bien es cierto que no tiene unos índices de audiencia muy altos a pesar de que la HBO se convenciera desde el capítulo piloto y haya encargado ya la segunda temporada. Pero lo que ha pasado con The Newsroom es que es un fenómeno más de facultades de Ciencias de la Información que social en sí mismo.

Quizás lo más llamativo de la serie sea su cabecera que es todo un guiño a la historia de los medios de comunicación y que a los apasionados de este mundo no puede dejarnos indiferentes. A mí, personalmente, me encanta.



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