¿Cómo se consiguen los votos?

¿Cómo se ganan unas elecciones? Consiguiendo el mayor número de votos, eso está claro, pero ¿cómo se consigue un voto? ¿Cómo los políticos son capaces de hacer que un ciudadano se decida por meter la papeleta de un partido determinado y no la de cualquier otro?

Aunque no lo parezca, la mayor parte de los ciudadanos nacemos con nuestra papeleta en el sobre. Es decir, que desde pequeños nuestro voto está prácticamente predestinado. Puede parecer imposible, pero es muy sencillo si entendemos qué es un marco interpretativo (o framming). El marco es la representación mental de todo aquello que nos rodea, a fin de cuentas es nuestro modo de entender e interpretar nuestro entorno. Sin estas representaciones seríamos incapaces de tomar decisiones o de elegir. De nuestro marco depende, por lo tanto, en gran medida el voto que nosotros emitimos.

¿Cómo se crean estos marcos? Son heredados, los marcos que tenemos vienen dados por el entorno en el que vivimos. De nuestro entorno (como de nuestro marco) forman parte determinados aspectos y se omiten otros. De esta manera nos creamos una conciencia respecto a lo que ocurre y actuamos en consecuencia a ello. En cierto modo, esto explica que muchos obreros voten a partidos conservadores porque estos obreros se han formado en entornos con marco conservador.

Está demostrado que como ciudadanos votamos por identificación con los candidatos y no por interés. Si fuera el caso contrario probablemente muchos de los partidos que ostentan el poder no estarían en él porque lo ocuparía el partido que mejores acciones promoviese para con sus ciudadanos.

El hecho de que los votantes cambien radicalmente su voto se debe a que se identifican con el discurso de un grupo político determinado. En política se juega con “la amenaza” porque los líderes amenazan a una clase social determinada con eliminar ciertos privilegios y muchos de los ciudadanos que forman esta clase social aunque sean contrarios al partido político acaban votando al partido que no es afín con su marco.
Es cierto que el marco de un ciudadano puede verse modificado por otro marco diferente. De esta forma, se modifica la forma que un ciudadano tiene de percibir su entorno. Es difícil que un marco se modifique porque las ideas no son permeables, pero puede llegar a ocurrir que un ideario influya en una persona de tal manera que modifique la forma que tenga de percibir su entorno.

Estas modificaciones pueden venir dadas por think tanks que son instituciones o grupos de expertos investigadores dentro de las ciencias sociales que están vinculadas o no a partidos políticos o grupos de presión, pero que se caracterizan por tener una orientación ideológica marcada que sea evidente para la opinión pública. Un ejemplo son: FAES o la Fundación Ideas.

Además de a través de los think tanks la forma que tiene un ciudadano de percibir la realidad puede verse modificada por la exposición que haga a los medios. Este hecho es bastante complicado porque, por norma, los ciudadanos suelen consumir medios que son afines con su ideología.

Con todo esto, podemos decir que los votos nos vienen heredados porque dependen de cómo vivimos la realidad que nos rodea y es difícil que nuestros marcos se vean modificados por lo que es difícil que nuestro voto cambie con respecto al de los individuos de nuestro entorno.