La recuperación que España necesita

La rueda de prensa del último Consejo de Ministros, celebrada el 27 de septiembre, podría pasar por ser una de las más optimistas desde que el Partido Popular llegó al Gobierno, sobre todo si la comparamos con la del pasado 26 de abril. 

Rueda de prensa del Consejo de Ministros (27.09.2013)

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría; el ministro de Economía y Competitividad, Luis De Guindos y el de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro; han comparecido este viernes para afirmar que la España está en la senda de la recuperación. Según las previsiones del Ejecutivo, la economía española crecerá el año que viene un 0,7%, no subirán los impuestos y se empezará a crear empleo. El Gobierno confía en que son los presupuestos de la recuperación económica porque aúnan la austeridad, el impulso al crecimiento y porque tienen un “marcado carácter social”.

En el mes de abril, la mesa de la rueda de prensa del Consejo de Ministros estaba formada por las mismas tres personas, pero con un semblante totalmente diferente porque dieron cuenta de una coyuntura económica acabada que duraría varios años y acabaría siendo una catástrofe para el conjunto de España. Según el Gobierno, decreceríamos y destruiríamos más empleo aún. Pero este viernes 27 todo ha sido diferente, el semblante serio de abril ha desaparecido para dar paso a los datos más optimistas desde la llegada de Rajoy a Moncloa.

Según De Guindos, la tasa de paro caerá al 25,9% y en la primera mitad de 2014 dejará de destruirse empleo y en la segunda mitad del año la Encuesta de Población Activa (la EPA) reflejará, por primera vez desde que comenzó la crisis “creación neta de empleo, ligera, pequeña, todavía insuficiente”.
La experiencia demuestra que para que se cree empleo es necesario un crecimiento de la economía que se sitúe en torno al 2% lo cual está muy lejos de las previsiones del Gobierno.

Probablemente, lo que España necesite, además de una recuperación económica (para que pueda crearse empleo), sea recuperar la credibilidad en los políticos. Es difícil creer en un Gobierno que dice que estamos saliendo de la recesión, pero no de la crisis o que tiene al que fuera tesorero de su partido en la cárcel acusado de delitos fiscales y cohecho y que podría destapar un caso de presunta financiación ilegal. La oposición, por su parte, está centrada en un proceso de renovación interna y prefiere no alzar mucho la voz porque tiene el caso de los ERE en Andalucía que pueden volverse contra ellos.

En definitiva, la verdadera recuperación que precisa España es una recuperación del empleo (más allá de los datos económicos) y que las formaciones políticas permitan hacer que los ciudadanos tengan confianza en los políticos como los que implantarán las medidas necesarias para salir de la crisis.

En realidad más que prever una creación de empleo, desde el Gobierno se presupone una no destrucción del mismo que está muy lejos de la recuperación económica del país. Los datos macroeconómicos quieren aportar luz a una sociedad descontenta, pero sobre todo, parada en su gran mayoría. Y aquí llegamos a la verdadera crisis que está en los datos del paro porque el Ejecutivo dice que el paro se mantendrá en niveles cercanos al 26% lo cual sigue siendo una sangría.