Andalucía ¿y ahora qué?

El PSOE Andaluz ha ganado el primer envite electoral de 2015. Y hay que destacar que lo ha hecho gracias a su cabeza visible, a Susana Diaz. Desde que llegara a la presidencia de la Junta de Andalucía en Septiembre de 2013, ha pasado de ser una casi desconocida (sobre todo en el territorio nacional) a convertirse en lideresa del PSOE. Ha sido capaz de vencer a la crisis interna que se ha vivido en su partido y ha mantenido los 47 escaños que obtuvieron los socialistas andaluces en 2012 a pesar del caso de los ERE, que han supuesto la imputación de varios cargos de la Junta.

Cien mil andaluces menos que en 2012 han decidido depositar su confianza en el PSOE; pero a pesar de ello, ha conseguido mantener el resultado. En sí, la clave de la victoria de Diaz radica en que medio millón de personas que votaron al PP en las anteriores elecciones, han decidido no hacerlo esta vez. Probablemente, algo habrá tenido que ver que Juan Manuel Moreno se haya presentado como la apuesta personal de Rajoy.

Por ahora, Podemos no es una alternativa clara porque tenían una aspiración mayor que esos 15 escaños que han conseguido. Por su parte, Ciudadanos ha obtenido nueve escaños que le convertiran en partido bisagra. Hay que reconocer, pues el mérito de estos dos partidos que han conseguido irrumpir en el parlamento andaluz haciendo que el arco parlamentario pase de tres a cinco partidos -el batacazo de UPyD es un hecho-.

Está claro que en ese parlamento Susana Diaz tendrá mayoría, pero queda por ver en quién se apoyará para "convertir" sus 48 escaños en 55 que son los que concentran la mayoría absoluta. Son varias las combinaciones posibles, pero adelantándose a ello el líder, Albert Rivera, ya ha anunciado que no llegará a pactos de Gobierno, sino que serán pactos puntuales.

En esta línea, la gran pregunta para Susana debería ser ¿y ahora qué? Los plazos electorales quedan en manos de Diaz que probablemente manejará como mejor le convenga. Habrá que ver si ahora, y como ya se ha dicho, la andaluza utilizará su victoria a nivel autonómico como trampolín a nivel nacional. En tal caso, ¿quién liderará el PSOE-A?, ¿Conseguirá mantener la hegemonía socialista en Andalucía que dura ya más de treinta años?

Seamos francos; el enfrentamiento con Pedro Sánchez está -no hay más que ver los carteles de cierre de campaña en Andalucía- y se le espera, pero eso ya queda para más adelante.